Sin embargo, de acuerdo con el secretario auxiliar del ayuntamiento, Chayanne Cruz Romero, a dos meses del desastre natural, la población sigue sin ser atendida por el gobierno estatal y la Federación.
La atención a las familias damnificadas, explicó, ha sido con recursos del ayuntamiento y con la ayuda de personas de otros estados del país, así como de fundaciones, quienes han enviado víveres a esta comunidad.
El registro contempla 198 viviendas afectadas, y de estas 40 son pérdida total tan sólo en este municipio.
En cuanto a la infraestructura educativa, aunque hay cuatro escuelas con grietas, de un total de cinco, las clases se reanudaron desde septiembre en las explanadas de los planteles y en aulas provisionales elaboradas con nylon, afirmó Cruz Romero.
El terremoto de magnitud 8.2, ocurrido el 7 de septiembre con epicentro en el Golfo de Tehuantepec, y que ha tenido más de nueve mil réplicas a la fecha, dejó en Oaxaca 81 víctimas mortales y más de 120 mil damnificados, quienes perdieron a familiares y su patrimonio.
En la zona istmeña viven a alrededor de 700 mil personas, de las cuales de acuerdo con los gobiernos federal y estatal, son 120 mil los damnificados por el fenómeno natural, a quienes se les entregarán las tarjetas de débito del Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros (Bansefi) para la reparación o reconstrucción de su hogar, según el censo realizado por la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).
Hasta el 4 de noviembre culminó la entrega de estos apoyos en Juchitán de Zaragoza, que se dieron durante una semana, y que a pesar de ser uno de los municipios más destruidos, fue el penúltimo para ser atendido en esta etapa de la reconstrucción que en un principio sólo habían sido contemplados 40 de 41 municipios del Istmo.
Aún falta por atender el municipio de San Pedro Tapanatepec, perteneciente al distrito de Juchitán de Zaragoza, informó el delegado de la Sedatu en Oaxaca, Elpidio Concha Arellano.
Sin precisar el número de damnificados, el funcionario prevé que el jueves 9 de noviembre comience la entrega de tarjetas en este último municipio que falta por atender.
Para la reconstrucción de la región del Istmo, donde hubo más de 63 mil viviendas dañadas, además de escuelas e inmuebles históricos destruidos, el gobierno de Oaxaca contempla ocho mil millones de pesos, y la cual estima se lleve a cabo en un año.
De acuerdo con el último reporte de Bansefi, del 29 de octubre, en el cual se aseguraba que con Juchitán terminaba la entrega de apoyos económicos a los damnificados del Istmo de Tehuantepec, se han repartido 54 mil 135 tarjetas que equivalen a 812 millones de pesos, recursos provenientes del Fondo de Desastres Naturales (Fonden).
Según el registro, los beneficiarios han gastado 582 millones 645 mil 796 pesos y de esta cifra, 65 millones 607 mil pesos han sido para la compra de materiales para la construcción, mientras el resto fue de libre disposición.
Para atender a los estudiantes de los planteles afectados de esta región se destinaron más de 292 millones 113 mil pesos para la construcción de 700 aulas temporales, las cuales debieron de entregarse el 20 de octubre, lo que no ha ocurrido a la fecha.