Sin embargo, tras pasar más de 40 minutos no llegaba ningún tipo de apoyo para el indigente; las personas volvieron a marcar, y fue entonces que minutos después, aproximadamente a las 08:15 horas llegaron integrantes de la Policía Estatal a bordo de una patrulla.
Los uniformados, sin embargo, se negaron a brindarle cualquier tipo de ayuda o solicitar el apoyo de la Cruz Roja Mexicana. Los agentes respondieron que por las nuevas políticas de la Cruz Roja, ya no recogían a indigentes a menos que alguien se responsabilizara o se hiciera cargo de los gastos médicos.
Cuando se les cuestiono a los policías de la Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca si entonces lo dejarían morir, su respuesta fue: “al ser alcohólicos, ellos saben cómo van a terminar”, según narraron los testigos.
Cerca de las 13:00 horas, el indigente murió tras agonizar más de cinco horas sin ningún apoyo de las instituciones de salud del estado, la Cruz Roja Mexicana y la repuesta de la Policía Estatal.