El gasto promedio del consumidor será de unos 6 mil 800 pesos, con rangos promedio desde los 200 pesos para quienes buscan aprovechar ofertas sin tener considerada la compra de un artículo en específico, según datos de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño de la Ciudad de México (Canacope-Servytur).
Dicho gasto promedio se enfoca principalmente a las familias que aprovechan la campaña para adquirir bienes de consumo duradero necesarios, para los cuales ahorraron durante el año.
Resuelve tu deuda alerta que varios negocios utilizan el logotipo de El Buen Fin, pero no están registradas. Lo malo es que si tú compras algún producto con algún defecto, no se podrá realizar un cambio de mercancía, ni podrás reclamar ante Profeco.
Asegúrate de que todas las tiendas que visites sean participantes oficiales, en caso de no ser así, lo mejor es evitarla. Puedes hacer una búsqueda en el sitio oficial de El Buen Fin.

Es la oferta más conocida y que te encontrarás en diversos establecimientos. También te podrás topar con precios fantasma que sólo escucharás y en tienda nunca aparecerá.
Cuando se trata de abarrotes, lo ideal es hacer las cuentas y ver cuánto estás pagando realmente por cada litro o kilogramo del producto, pues es posible que en realidad pagues más y además no necesites tantos productos.
En el caso de cualquier otro artículo, seguramente te pedirán que elijas algo de menor precio, lo que quiere decir que no comprarás algo de la misma calidad.

Durante ese fin de semana es común encontrar algunas prácticas engañosas en algunos comercios como el subir de manera previa el precio de los productos, para después difundir el “gran” descuento o promoción.

Tal vez te ha pasado que has visto o escuchado una súper oferta, asistes desde temprano a la tienda, pero ¡sorpresa!, lo que buscabas ya está agotado. En vendedor del lugar se te acerca, te habla de otras posibilidades, de muchas posibilidades.
Tú no has comparado precios ni sus características, pero ya estando en la tienda, te entra la ansiedad por comprar y cuando al fin lo haces, aunque ya es muy tarde, te das cuenta que no era lo que te convenía.
Por eso, no te dejes engañar por el tamaño o la cantidad de los descuentos, compara y fíjate que el precio final sea el más bajo.

Si eres buen pagador El “Buen fin” te puede dar ofertas interesantes a meses sin intereses con las que puedas comprar algo sin que le pagues intereses de más a los bancos y liquidarla en cómodas mensualidades.
Pero si eres malo administrado tu tarjeta es mejor que del 17 al 20 de noviembre la dejes bajo llave en casa. Pero si decides utilizar tu tarjeta, verifica que en tu ticket de compra se lea “meses sin intereses”, pues en años anteriores, la oferta era esa, pero al fina de cuentas los consumidores terminan pagando interés y endeudandose más de la cuenta.
Verifica que se haga válida la promoción al momento de firmar el voucher, que el importe sea correcto y refleje la promoción elegida. Guarda el comprobante y revisa que se refleje de forma correcta en tu estado de cuenta en diciembre.

Al pagar con tarjeta de débito o crédito, solicita que se haga la operación estando tú presente, así evitarás que puedan clonar el plástico o hacer cargos indebidos. Si el comercio desliza por segunda vez tu tarjeta por la terminal, solicita el comprobante a fin de verificar el motivo del rechazo.